El 93% de las personas casadas dicen que el amor fue la razón para casarse, ¿y sus bienes?…

Románticamente 4 de cada 5 chicas sueñan con la propuesta perfecta de matrimonio, bien sea en un destino paradisíaco o con detalles preparados por el novio en el que reúnan momentos juntos de la travesía que les lleva al SÍ ACEPTO ante una autoridad. El tan anhelado anillo de compromiso será colocado en el dedo anular izquierdo como parte de la tradición que muchos cumplen sin saber la razón detrás, ¿sabes cuál es? Justamente allí se encuentra la vena amoris o también llamada la vena del amor que termina directamente en el corazón.Así como estos muchos detalles envuelven el enlace de dos personas, que visto desde el punto legal, requieren trámites propios del acto. Uno de ellos posiblemente sea el régimen de separación de bienes que deciden efectuar los cónyuges como parte de sus acuerdos prenupciales en vista del respeto de sus opiniones particulares.

¿Es garantía de seguridad personal? ¿Por qué optan firmarlo? En el siguiente artículo conocerás si esta medida favorece o perjudica a los participantes.

SEPARACIÓN DE BIENES - EL PATRIMONIO SE VE AFECTADO POR LOS DIVORCIOS

¡Marido y mujer!

En Estados Unidos se contabilizan 5.800 matrimonios civiles a diario, enlace en el que se consolida el amor entre dos personas ante una autoridad civil. Tradicionalmente dos individuos deciden casarse para formar una familia de acuerdo al lineamiento que ha sido, de cierto modo, impuesto por la sociedad ya que desde tiempos remotos ha sido parte de los requisitos para considerar a una persona responsable y completa. En la antigua Roma, llegar a la edad de los 30 años sin haber contraído matrimonio era algo inimaginable, razón de burlas y señalamientos por quienes rodean y comparten lo que muchos hoy creen importante.

En la antigüedad el matrimonio no se basaba en el amor mutuo del que otros tanto hablan, sino del interés por emparentar familias para compartir propiedades y tener hijos para perpetuar el poder, siendo quizás inoportuno pensar en la separación de bienes; este deseo netamente de provecho es visto como una imposición cruel de los padres por darles una vida sin carencias que posiblemente ellos padecieron.

Mayormente en las culturas de raíces orientales podemos ver como son arreglados pactos entre los jefes de familia para mezclarse por medio de nupcias sin que siquiera los novios se conozcan ni muchos menos se aprecien, la mujer no tenía ninguna injerencia y ni pensaba en la separación de bienes. Y es así, durante la mayor parte de la historia de la humanidad la gente se casaba por un conjunto de razones, para ellos, lógicas. En la literatura e incluso historias de cine, encontramos los relatos de familias con negocios florecientes, padres magistrados en un pueblo, castillos lujosos o suegros que están de acuerdo con la misma interpretación de las sagradas escrituras y eso basta para emparentarse. De esos matrimonios tan poco razonables emanaba soledad, infidelidades, abusos y frialdad por un provechoso arreglo.

Sin embargo actualmente triunfan las preferencias particulares, esas que motivan a una mujer y a un hombre a compartir con su pareja por medio de un documento en el que se les adjudique la famosa frase marido y mujer. Para casarse necesitarán presentar unos requisitos indispensables como son su identificación personal, acta de nacimiento y dos testigos; en caso de estar en condición de divorciado o viudo deben presentar el acta que lo certifique.

Generalmente se solicita que los contrayentes sean mayores de edad ya que en este momento es cuando tienen derecho de tomar decisiones legales sin necesidad de la presencia de los representantes, sin embargo con el consentimiento de los padres y sus respectivas identificaciones anexadas a los demás requisitos mencionados, pueden participar de la ceremonia. En las leyes romanas se constata que la edad mínima para casarse era 14 años para los hombres y 12 para las mujeres, ¿te casarías a esa edad?

Si la pareja contraerá matrimonio civil de separación de bienes es de carácter obligatorio entregar al encargado civil el acto auténtico el cual será debidamente registrado y notificado con anterioridad a la celebración del matrimonio.

Régimen pautado

A principios del siglo XVIII las mujeres de Inglaterra perdían todas sus propiedades al casarse, y eran sus maridos quienes tomaban el control de ellas, costumbre que permaneció hasta el siglo XX cuando aún pedían permiso a sus esposos para realizar el trámite de apertura de una cuenta bancaria o comprar un auto. ¿Increíble no?

Antes que nada debemos definir que es un régimen económico matrimonial, de acuerdo a estatutos civiles es el conjunto de normas legales que delimitan los intereses, derechos y las obligaciones monetarias de los novios. Este se puede pactar ante un notario antes o después de la boda, en un acto conocido como capitulaciones matrimoniales que es inscrito en el Registro Civil junto con el matrimonio. Por tanto son un acuerdo de naturaleza contractual otorgado por los cónyuges, en virtud del cual podrán hacer valer sus deseos.

En el régimen de separación de bienes prevalece la independencia económica de cada cónyuge puesto que cada uno puede adquirir, administrar y disponer de sus bienes con entera libertad sin requerir el consentimiento del otro para venderlos, alquilarlos y donarlos. Como excepción se prevé el domicilio familiar dado que su venta se precisa en conformidad de ambos aun en el caso de que pertenezca exclusivamente a uno.

Además en este contrato se establece que las deudas contraídas por uno de los cónyuges serán de su exclusiva responsabilidad sin que se comprometa el patrimonio de su pareja, claro que las deudas contraídas por ellos si serán responsabilidad de los dos. Asimismo supone que cada miembro contribuirá con el pago de los gastos familiares en proporción a sus respectivos recursos económicos.

Quienes consideren optar por la separación de bienes deben discutirlo con su pareja para estar de acuerdo, una vez elegido cada parte deberá entregar un registro a su nombre de los bienes acumulados antes del matrimonio o cuando éste ya haya iniciado. No obstante existe la diferencia de que si realiza antes es más fácil delimitar los bienes por partes, mientras que con el matrimonio ya empezado o al finalizarlo, se torna complicado definirlos pues los bienes acumulados ya estarán divididos.

Otro punto a considerar del régimen de separación de bienes es que no se podrá acceder a los bienes de la pareja pues estos pasan a ser parte únicamente suyos por la división y solo ellos dispondrán de los mismos.

No son más que parte del respeto de los deseos personales que son plasmados en un acuerdo pero algunas veces nos pueden parecer un tanto extraños, por ejemplo el firmado por el creador de Facebook con su ahora esposa Priscilla Chan. Antes de formalizar su relación, la pareja tuvo que llegar a dos arreglos, en el primero solo se les permitía tener una cita una vez a la semana por una hora pero no en solitario. En el segundo el popular Mark, que posee una fortuna que supera los 63 mil millones de dólares, tenía que disfrutar de 100 minutos a solas.

Separación de bienes gananciales

Desconocemos parte de los términos jurídicos hasta que nos vemos envueltos en trámites legales, relacionados al tema de separación de bienes en el matrimonio tenemos por ejemplo bienes privativos y gananciales.

Los primeros corresponden a la masa de bienes comunes de ambos cónyuges los cuales se denominan gananciales ya que por proceden precisamente de las ganancias habidas durante el matrimonio. Se presumen que son gananciales los bienes mientras no se pruebe que pertenezcan privativamente a uno de los miembros de la pareja, incluyendo que posiblemente quede sin efecto por confesión de privacidad de un bien. De este modo, la prueba para ratificar los determinados bienes propios de alguno será la confesión del otro, aunque pero tal testimonio por sí solo no perjudica a los herederos forzosos del confesante, ni mucho menos a los acreedores.

Entre los bienes privativos están los derechos que le pertenecieran al comenzar la sociedad, los que se adquieren por herencia o donación, por derecho de retracto, cualquier negocio jurídico que no sea por mortis causa, el resarcimiento por daños inferidos, las ropas y objetos de uso personal que no sean de alto valor, los instrumentos necesarios para el ejercicio de la profesión u oficio salvo las pertenencias de un establecimiento.

Los bienes gananciales abarcan los obtenidos por el trabajo, frutos, rentas o intereses, los adquiridos a título oneroso, por derecho de retracto de carácter ganancial, las empresas y establecimientos fundados durante la vigencia de la sociedad por uno o cualquiera de los cónyuges a expensas de los bienes comunes.

En la aplicación de los términos de la separación de bienes existirán confusiones dado que distintas situaciones tendrán un carácter difuso por influencia de acciones terceras, un caso es si un miembro de la pareja está casado bajo régimen de gananciales y hereda una casa de sus padres, será privativa. Pero si alquila el inmueble las rentas que percibe son gananciales.

Ahora bien, ¿qué diferencia los bienes gananciales de la separación de bienes? El modo más sencillo de apreciarlo es con respecto al dinero de los contrayentes ya que este es independiente, así como lo son sus bienes patrimoniales. Para el caso de los gananciales el dinero pasa a ser común desde el momento en que contraen matrimonio por lo que, si deciden divorciarse, se divide a partes iguales.

Así también se producen detalles con respecto a una herencia porque ésta no se incluye como tal, siempre será únicamente del beneficiado y no entrará ninguna repartición. Lo mismo con las indemnizaciones y las donaciones otorgadas. Adicionalmente en el régimen de gananciales el dinero se pone en común al igual que las deudas, si tu pareja las contrae serás igual de responsable para liquidarlas pese que estén separados.

Los artistas no están exentos de sufrir altibajos, algunos piensan que contrayendo matrimonio con un magnate su fortuna será más grande, lamentablemente la suerte no les acompaña dado que ven como caen en quiebra y su relación termina antes de pisar al altar. Los adinerados empresarios suelen tener acuerdos pre nupciales como la separación de bienes u otros bastante exagerados, algunos portales de farándula revelan que entre las cláusulas incluyen que a excepción de los regalos por el compromiso, la boda, cumpleaños y aniversarios, ninguna joya o lujos superará cierta cantidad establecida.

Decisión después del matrimonio

Lo más común es el régimen de bienes gananciales pero en ocasiones hay parejas que tiempo después de casarse y, aún sin separarse, deciden firmar la separación de bienes, ¿qué deben tener en cuenta para realizarlo?

Antes que nada aclaramos que la razón que les motiva nunca puede ser evadir las responsabilidades económicas de alguno de los cónyuges, pues de ser así se les podría juzgar por un delito de alzamiento de bienes penalizado de acuerdo al Código Penal. En oportunidades ocurre cuando una de las partes posee una empresa a su nombre pero las cosas no salen como esperaba y como el negocio solo genera deudas, decide poner todos los bienes a nombre de su pareja y emplear la separación de bienes como cortina de humo para evitar el embargo como forma de pago.

A partir del momento en el que se disuelva el régimen que inicialmente se decidió como la separación de bienes en el matrimonio, la pareja pasará a gestionar de forma libre sus propios bienes, las pérdidas y ganancias de ambos afectarán sólo a la persona que las obtenga. Los bienes en común, como la vivienda, tendrán  que costear a partes iguales; todos los gastos para el sostenimiento de la familia y de los hijos en común también deben dividirse.

Una modalidad que se aplica para evitar conflictos en la gestión de los pagos es que los cónyuges suelen tener una cuenta bancaria de titularidad compartida para ingresar sumas equitativas de dinero periódicamente y así cancelar los recibos de servicios como el agua, luz e hipoteca.

En caso de adquisición de una propiedad, la misma pertenecerá a la persona a cuyo nombre se inscriba, incluso si ambos pagan parte del precio, luego de la separación la cantidad que el miembro no propietario aportó puede ser demostrada. De ser así se considerará como un préstamo y generará el derecho de reclamar la merecida devolución de la misma. Es importante destacar que ningún caso habría consecuencias para los hijos pues el régimen de separación de bienes solo afecta los derechos económicos de los cónyuges.

Al parecer las estadísticas demuestran que las parejas donde la mujer sea 3 o más años mayor que su marido corren con 53% más de probabilidades de divorciarse que los matrimonios en los que se dé el caso contrario.

En parejas famosas cuando se hace pública la separación los medios cotillean sobre los términos que habitualmente perjudican a uno más que otro. Uno que dio mucho que hablar fue el de Tom Cruise con Katie Holmes dado que en el acuerdo que ambos firmaron antes de unirse en matrimonio, donde al parecer intervino la cienciología que es la doctrina que sigue el actor, se especificaba que la actriz no podría hablar a su expareja por un lapso de cinco años después y tampoco podría hacer pública ninguno de sus amoríos en el mismo tiempo. Pero los detalles no terminan allí, si Holmes decidía divorciarse antes de los 11 años de matrimonio, recibiría tres millones de dólares por cada año que permanecieron juntos, pero si duraban más tiempo juntos obtendría la mitad de la fortuna del prestigioso actor; cosa que no ocurrió ya que la pareja duró seis años juntos.

¡Regirse sin protestar!

A ella le gustan las carreras de caballos y él prefiere el polo, sigue teniendo el genio muy vivo pero ella ha aprendido a ponerle en su sitio. Esta es la historia de 70 años de convivencia de una pareja, que como muchos han querido, fueron protagonistas de una boda como en un cuento de hadas. Hablamos de Isabel II de Inglaterra y el príncipe Felipe, duque de Edimburgo. El matrimonio más longevo en la historia de la corona británica guarda muchas reglas que tal vez desconozcas como el hecho de que en la mesa no pueden empezar a comer si la reina no ha terminado su plato, tampoco los miembros de la realeza podrán votar porque sería catalogado como influencia popular, ni mucho menos ejercer funciones de gobierno.

La convivencia de los monarcas es siempre de interés para el pueblo que quiere indagar sobre sus vidas. Según reseñan fuentes españolas los rumores de divorcio de los Reyes de España cada vez son más ciertos aunque siguen cumpliendo con sus funciones de monarcas, pero al parecer en silencio sufren una fuerte crisis matrimonial. El carácter de la reina Letizia es quizás una piedra en el zapato para el mundo de la corona española al igual que su personalidad dura, lo cierto es que frente el hipotético escenario de separación muchas han sido las especulaciones dado que ella sería la más perjudicada. ¿Por qué?

Don Felipe seguirá su vida y sus funciones como rey, característica figura que resulta ser intocable para los españoles, incluso para la justicia, porque su persona es inviolable y no está sujeta a responsabilidades. Según lo establece el artículo número 56 de la Constitución Española de 1978, sus actos estarán siempre refrendados por el presidente de su nación.

Por ello en caso de divorcio, el procedimiento debe hacerse bajo mutuo acuerdo o Letizia podría ser demandada por el rey, se casaron bajo el régimen de separación de bienes pero en aquel momento un punto que no fue acordado son las famosas Capitulaciones. Estas son una especie de contrato pre nupcial firmado por ambos pero que necesariamente no son discutidos, irónicamente un abogado cercano reveló que han sido unilaterales. Son innegociables, tal como están redactadas deben firmarse sin cambiar siquiera una coma. El profesional de derecho que se pronunció al respecto, es también primo de la reina, aconsejó no firmarlo alarmado por la supuesta ilegalidad del texto que leía. Quizás lo más terrible sea el hecho que Letizia perdería la custodia y patria potestad de sus hijas llamadas Leonor y Sofía, como responsables se encargarían el rey Felipe y la corona española por una razón de peso: Leonor la princesa de Asturias es la primera en la línea de sucesión al trono, debe ser preparada para recibir el reinado de su natal país.

¿Y económicamente? Es también otro aspecto que se dio a conocer, Letizia recibiría una manutención del Estado y con disposición de dos viviendas familiares aunque están unidos por separación bienes, pero claro, los encuentros con sus hijas serían establecidos bajo un riguroso régimen de visitas impuesto en documento legal. De ser cierto un inminente divorcio, Letizia Ortiz de Rocasolano perdería su título como la reina de España y el trato de alteza real, pero si solo se separan podría conservarlo por ser madre de la futura Reina.

Distintos historiadores explican que es una tradición del terreno de los títulos nobiliarios, donde el consorte, si se rompe la unión matrimonial, debe dejar de usar el título impuesto socialmente.

A ello se suma Kate Middleton quien también perdería su título de duquesa de Cambridge así como el derecho de vivir en las propiedades que haya compartido con el Príncipe William. Cuentan con cláusulas estipuladas en las que destacan que ella recibiría una suma inicial, cifra que descendería si volviera a casarse sin poder reclamar parte del patrimonio de su esposo. Los pequeños quedarían bajo la tutela del padre con derecho a visitas de su madre.

Si fallece alguno de los miembros, ¿quién hereda sus bienes? 

Cuando dos personas están casadas con separación de bienes y la herencia debe ser otorgada, se disuelve dicho régimen entre los esposos y la masa patrimonial que compone la sucesión será integrada únicamente por lo que le correspondía al fallecido; en la escritura de partición también se establece la liquidación de la sociedad de gananciales.

Si el régimen que mantenían los cónyuges era el de separación de bienes cada uno es dueño de su patrimonio ya establecido por lo que no será preciso realizar la liquidación previa al reparto de la herencia. En los casos en los que no hay hijos obtienen la condición de herederos tanto el cónyuge como los progenitores supervivientes, lo que reciben vendrá condicionado a si el fallecido había otorgado o no testamento, así como al régimen sucesorio aplicable en el lugar en que residió.

En un panorama distinto, hoy en día son muchas las parejas que se casan bajo este régimen matrimonial pensando será más fácil la disolución luego de la ruptura bajo los criterios de “lo mío es mío y lo tuyo es tuyo” como lo dijo en su momento John F Kennedy. No obstante se prevé una compensación económica tras la extinción del régimen de separación de bienes.

En algunos países como México los cónyuges cuentan con el derecho a un pago de alimentos teniendo en cuenta el valor de los bienes que se adjudicaron, si el matrimonio se celebra bajo el régimen de separación de bienes y uno de los cónyuges se dedicó más a las labores propias del hogar y al cuidado de los hijos en común durante el tiempo de unión, o bien, que la mayor parte de sus ingresos personales los invirtió en el mantenimiento del mismo, tendrá derecho a una compensación. De ser herencia o donación no entrará en la remuneración, por lo que en esa circunstancia, el juez determinará el monto que corresponde.

Bien sabemos que cada acción conlleva a una reacción, por tanto los acuerdos legales como el régimen de separación de bienes generará beneficios y consecuencias a evaluar por los participantes, mismas que son detalladas a continuación.

VENTAJAS

Se respetan los bienes propios. Ofrece a cada cónyuge una mayor libertad e independencia económica ya que mantienen la propiedad a su exclusiva titularidad y goza de libre disposición de todo aquello que se poseía desde soltero(a), así como de futuras herencias que recaigan sobre ellos.

Menor renta. Si hablamos desde un punto de vista fiscal, el matrimonio con separación de bienes promueve declaración de forma individual, que a su vez permite que la renta que se realice sea notablemente más baja que si se expone de manera conjunta, por ello los impuestos serán mucho menores.

Reducción de conflictos. Ofrece menos problemas a la hora de separarse de la pareja debido a que cada uno se queda con sus propiedades y únicamente se deben dividir todos aquellos bienes que hayan sido conseguidos de manera común simplificando todo el proceso del divorcio. Disminuye las discusiones dentro de la pareja porque el propietario único podrá disponer de la compra, venta, administración o hipoteca de sus bienes; claro está, a excepción de la vivienda familiar.

Protección del patrimonio. Otra de las ventajas de la separación de bienes es que brinda mayor seguridad en aquellos casos en los que uno de los miembros lleva a cabo una actividad profesional que sugiera riesgos para todo el patrimonio familiar. Como se trata de obligaciones exclusivamente personales, si uno de los dos cae en quiebra o contrae deudas, los bienes de la pareja no serán afectados.

Resguardo. La conveniencia de este régimen está, además de las mencionadas, es que en caso de término del matrimonio no deben recurrir al proceso de liquidación ya que el patrimonio fue siempre particular, además para la mujer, es oportuno porque no debe contar con las autorizaciones que a veces son requeridas del marido en la sociedad conyugal.  También para aquellas que antes de casarse tienen un gran patrimonio o recibirán una jugosa herencia y no quieren que esto sea administrado por su pareja.

SEPARACIÓN DE BIENES - LA NEGOCIACIÓN DEL PATRIMONIO

DESVENTAJAS

Equidad perjudicial. Si en aquellas propiedades que fueron compradas durante el matrimonio solamente queda constado el nombre de unos de los cónyuges como titular, éste podrá quedarse con los bienes sin necesidad de declararle como serán administradas a su pareja; al menos esto se cumple hasta que un juez indique lo contrario por apelación de la parte afectada.

Desprotegidos. En el caso de aquellas parejas que no toman sus precauciones, hay que indicar que posiblemente uno de los miembros resulte muy perjudicado. Cuando ocurre la separación de bienes en el matrimonio, el divorcio deja en una importante desventaja al cónyuge que se ha ocupado de la casa y, en el caso de tenerlos, de los hijos, dejándole completamente desamparado.

Descontento familiar. Generalmente las decisiones están a cargo de los novios pero no solo ellos forman parte del vínculo estrechado sino también sus familiares, en este sentido las personas cercanas tienden a señalar que la firma del documento de separación de bienes es un acto de desconfianza ya que si en un futuro deciden divorciarse no es necesario una lucha desproporcionada porque ambos cuentan con la madurez y respeto necesario para afrontar la demanda legal.

Egoísmo. Es evidente que alguna de las partes tendrá mayor patrimonio influyendo en la capacidad de invertir en negocios, acotando dudas sobre las propuestas que su pareja le ofrezca decidirá no participar. El escenario contraproducente traerá discusiones porque algunas personas que firman este contrato lo hacen para no mezclar su dinero.

¿Qué acuerdo matrimonial firmarías? ¿Crees que firma de un acuerdo pre-nupcial produzca desconfianza? ¿Qué motivos te impulsarían a tomar la decisión? Si has tenido alguna experiencia respecto a este controvertido tema déjala en la caja de comentarios. Siempre es un placer poder leerte e interactuar contigo.