Millones de personas son atraídas por las virtudes del mar, tanto que deciden vivir cerca
Los doctores recomiendan visitar el mar frecuentemente, pues un viaje, aunque sea corto, alegra y anima a sus pacientes. Imagina entonces, cómo cambiaría tu vida viviendo en la costa, rodeado de arena y ambiente cálido. Sin importar el día de la semana, al amanecer tendrías una gran vista que te acompaña hasta la noche con un cielo estrellado. Vivir cerca del mar no solo es bueno para el estado de ánimo, también influye en tu estilo de vida.
Ciertamente tus decisiones varían de acuerdo a un nuevo presupuesto, menú de comida distinto y vivienda con adaptaciones. Por ello, descubre en el siguiente artículo las bondades y consecuencias de vivir cerca del mar.
VENTAJAS
Tranquilidad con los seres queridos. Contemplar hermosas puestas del sol similares a las de postales, es quizás una de las mejores virtudes de vivir cerca del mar. En compañía de familiares y amigos, el encanto de los atardeceres se aprecia mejor. Una reunión bajo el cielo estrellado, es también un excelente plan para compartir aprovechando el increíble paisaje.
Sistema inmune fortalecido. La exposición al sol favorece la producción de vitamina D, nutriente esencial para el fortalecimiento del sistema inmunológico. Otro beneficio de los rayos solares, es el aumento de los niveles de endorfinas.
Menos estrés. La disminución del estrés puede también estar relacionada con el mar, ya que en su entorno estamos más relajados. Este beneficio es propio de la ionización de la brisa, debido a su influencia en el aumento de la serotonina. Recordemos que es un neurotransmisor que regula el estrés y ansiedad en los individuos.
Sin excusas para ejercitarse. Tienes a tu disposición kilómetros de playa para correr, jugar voleibol y realizar rutinas de ejercicio. Gracias a ello, se reducen el riesgo de sufrir accidentes cardiovasculares, respiratorios y la obesidad. Además, se fortalecen los huesos y las articulaciones, que incrementa las posibilidades de llevar una vida saludable sin necesidad de acudir a un gimnasio.
Ricas comidas. Las delicateses del mar son el platillo favorito de millones de personas de todo el mundo. Estos productos aportan nutrientes esenciales para una dieta balanceada en la que los ácidos grasos cobran un papel protagónico, ya que el cuerpo no los produce por sí solo. Disminuyen el riesgo de padecer Diabetes, Alzheimer, anemia y depresión. Debido a la cercanía de los establecimientos comerciales con el lugar donde se extraen los productos marinos, los costos son menores y toda la población puede adquirirlos sin problemas.
DESVENTAJAS
Calor agobiante. Si bien te gusta el verano, debes tener en cuenta que solo se trata de una estación y es muy distinto a vivir en una zona que es calurosa todo el año. Si el simple hecho de sudar te pone del mal humor, no la pasarás bien en la costa. Las altas temperaturas son una característica predominante, que influye en la decisión de elegir una vivienda en la cercanía.
Viviendas expuestas. La exposición a los rayos solares provoca que el deterioro de la pintura que recubre los exteriores de las viviendas. La sal marina también hace de las suyas, pues termina penetrando en las piezas metálicas generando corrosión en las edificaciones y autos. La humedad es otra desventaja que contribuye con el mal aspecto por las manchas en las paredes. Este conjunto de efectos, favorecen el desprendimiento de olores desagradables que traen consigo moho y ácaros.
Deshidratación. Es imprescindible consumir líquidos para mantener el cuerpo hidratado y evitar el malestar asociado a las altas temperaturas. Algunas personas, experimentan mareos, vómitos, fuerte dolor de cabeza y aumento de la presión arterial.
Condiciones climáticas preocupantes. Las lluvias torrenciales, huracanes y tornados, suelen atacar con mayor intensidad las costas. Por ello, existen una serie de mejoras a realizarse en las viviendas, que comprometen el presupuesto familiar. Por ejemplo, las ventanas reforzadas, para evitar daños con los fuertes vientos. Así también, la población cercana al mar, toma sus precauciones y atiende los llamados de desalojo por parte de las autoridades competentes. Según sea el fenómeno natural que les afecta, sufren secuelas del evento falta de energía eléctrica, dificultad para encontrar alimentos e inundaciones.
Es imprescindible un buen sistema de refrigeración. Los alimentos se descomponen rápidamente, así que para su conservación, es vital contar con un buen refrigerador. Si las frutas o productos enlatados pasan horas fuera del mismo, se dañan fácilmente y ya no es recomendable consumirlos. Para comodidad, las familias instalan un sistema de aire acondicionado que alivie el calor para poder descansar mejor durante la noche. Es una inversión razonable, pero constante ya que los equipos necesitan mantenimiento para evitar las averías.
¿Con qué frecuencia vas a la playa? ¿Está entre tus destinos favoritos? ¿Te gustaría vivir cerca de la costa? ¿Qué te motivaría a hacerlo? Anímate y comparte en la caja de comentarios tus respuestas ¡Es un placer leerte!
