La necesidad de alimentarse llevó al hombre hasta la orilla del mar… Y más allá
Alimentarse es una de las necesidades básicas del ser humano, consumimos más de media tonelada de alimentos al año aportando los nutrientes esenciales al cuerpo para cumplir con las actividades celulares vitales. Entre los bocados que más disfrutamos encontramos los distintos platillos a base de especies del mar y que se obtienen de la pesca artesanal, algunos que miles de personas degustan como el caviar blanco, proveniente del pez esturión beluga siendo la presentación del mismo la más costosa del mundo.
Más de 3.100 millones de personas dependen del pescado porque le incluyen en 20 % de su ingesta total de proteínas animales y otros 1.300 millones un 15 %; el índice de población mencionado es generalmente responsable de su recolección ya que se dedican a la pesca artesanal. Esta actividad inició hace mucho, ¿pero es hoy en día tan importante como se cree? Para responderle descubre en el siguiente artículo los aspectos positivos y negativos de su empleo.
¡A toda marcha!
Desde tiempos remotos el hombre ideó sus propios mecanismos que les permitieran defenderse de los animales con los que compartía territorio y además como implementos de caza para obtener la carne de los mismos. Descubrió el fuego, aprendió a guiarse con las estrellas y fabricó balsas con ramas de árboles que les permitiera atravesar ríos así como transportar comida a pueblos vecinos siendo los primeros indicios de comercialización para la historia y siendo parte de la pesca artesanal. Los avances permitieron que con 20 metros de eslora y una velocidad entre 5 y 9 km/hora, se construyera el que se consideró como el primer intento de embarcación a vapor, el Fulton. El barco navegó en el río Sena propulsado por una rueda con paletas gracias a una maquinaria a vapor.
Los trabajos siguieron y para 1807 se terminó de construir en Estados Unidos una pequeña nave de madera denominada Clermont, por el lugar al que se dirigió dicho navío en su primer viaje, siendo el primer barco propulsado por ruedas que giraban por una maquina también de vapor; también recibió el apodo de El monstruo de Fulton dado su gran tamaño. Su inventor pudo recorrer solo 240 km del río Hudson partiendo desde Nueva York a Albany realizando una parada en Clermont.
Muchos de modelos que se crearon luego se perfeccionaron de forma tal que se emplean actualmente para transportar productos y desarrollar la pesca artesanal, constituida por embarcaciones pequeñas que generalmente no superan los 15 metros, faenan cerca de la costa en jornadas establecidas por los pesqueros inferiores a las 24 horas. Su tripulación consta de uno y cuatro marineros que, casi siempre, comparten vínculos familiares.
Pescar en grupo es una actividad heredada que aún se mantiene entre los trabajadores del mar, la asociatividad, explican los historiadores, está presente desde que parten de casa muy temprano a realizar el mantenimiento de sus embarcaciones para inmediatamente partir a alta mar. La red es el arte de pesca que por excelencia agrupa a las familias, comenzando por los adolescentes que aprenden sobre la actividad y se inmiscuyen cuando entre sus manos sujetan los extremos de las mayas sumergidas en el mar.
La escala de extracción de la pesca artesanal es pequeña y por ende su producción, que oscila entre los cinco kilos hasta los 250 kilos diarios de pescado y/o moluscos como medida máxima de captura, al menos en el caso de las pesquerías promedio. Además, la pesca artesanal, producto de su escala de producción, tripulación y arraigo a las comunidades pesqueras, es un sistema productivo en el que la redistribución de los recursos con los que cuentan, como bienes públicos y escasos, es más equitativa en comparación con la pesca industrial.
No toda actividad pesquera genera efecto del mismo tipo sobre los ecosistemas marinos, en este sentido las pesquerías industriales y semi-industriales representan altos niveles de esfuerzo, gran poder de pesca y empleo de redes de cerco que tienden a afectar las poblaciones de especies marinas así como sus hábitats, en contraste con la pesca artesanal. Es por esta razón que las medidas de control para las pesquerías industriales y semi-industriales deben ser muy estrictas como se aprecia son aplicadas en países desarrollados donde existe alta inversión económica para investigación de los sistemas pesqueros que asegure el análisis de datos de distinta índole mediante estudios continuos. La evaluación es constante en conjunto a la dinámica compleja de las pesquerías en la que eficientemente se implementan estrategias de manejo que integran múltiples herramientas para un control óptimo con el fin de mantener el rendimiento de las poblaciones de pesca y la rentabilidad de sector.
Características de la pesca artesanal
Claramente quienes se dedican a la pesca artesanal hacen de su arte un conjunto de técnicas, que visto desde otras perspectivas de personas ajenas al tema, son muchas veces complicadas de entender. No es solo lanzar la red al agua, es tan complejo como saber cuándo es el mejor momento para pescar. La apreciación se perfecciona con el tiempo, ya que aprenden que existen algunos momentos mejores que otros bien sea dentro de un periodo, o simplemente en alguna hora específica del día. Para muchos trabajadores el tiempo es limitado y es la razón del provecho máximo que les caracteriza, además implica hacer una planificación de acuerdo a los factores que más influyen en el rendimiento de la pesca dado que son un apoyo para decidir la época del año, la hora del día, la temperatura del agua e incluso la cantidad de luz.
Por ejemplo durante la estación del verano el sol calienta el agua cerca de la superficie, dado que a los peces les gusta el agua más fría también necesitan los niveles de oxígeno más elevados así que van a migrar a una área que esté entre los dos niveles de agua. Por su parte la llegada del otoño y las temperaturas más frías, enfría el agua de la superficie llegando a ser casi tan pesada como en la profundidad. Al continuar se vuelve más uniforme en temperatura y nivel de oxígeno, por tanto permite que los peces se muevan libremente siendo un poco difíciles de encontrar mientras se mantengan estas condiciones, una vez el clima se vuelva frío y a su vez comience a enfriar la superficie, los peces se quedarán cerca de la profundidad ya que el agua es más tibia favoreciendo el trabajo de pesca artesanal.
Junto con los conocimientos que adquieren se encuentran además las técnicas, propias de algunas zonas más que otras, que permiten capturar los peces fácilmente. El trasmallo o solta red de enmalle es un caso, en el que se utiliza una red creada específicamente para capturar determinadas especies, con la que se tiene la libertad de cambiar su dimensión para capturar especies más grandes según se requiera. La red está formada por piezas de tres paños como popularmente se les llama, cosidos a una barra horizontal que sirve para arrastras denominada relinga; la función del trasmallo es embolsar al pez de forma que quede sujeto a la hora de subirlo a la embarcación. Otra implementada en la pesca artesanal es el rastro que se utiliza para el marisqueo desde el barco con la particularidad que es similar a la pesca de arrastre pero con un sistema de púas que remueve el fondo para poder capturar los moluscos. Como trampas tenemos las nasas o cadufos que se incluyen en dicha modalidad porque se fijan al fondo y se usan para capturar crustáceos o pulpos.
Relatos de a bordo
La empresa de pesca artesanal no precisa realizar grandes capturas para ser viable económicamente aunque su crecimiento se limita ante la escala de producción, un hecho que, lleva implícito un componente ético de cómo se redistribuyen los recursos pesqueros. Así pues este modo favorece que muchas familias puedan dedicarse a esta actividad generando más empleo directo que en la pesca semi-industrial e industrial.
Una de las características más importantes de este tipo de pescadores es que comúnmente delimitan y se apropian de determinados espacios de pesca que habitualmente son manejados mediante acuerdos comunitarios. La pesca artesanal, que también se conoce como “pesca tradicional”, proporciona alimentos y medios de subsistencia a muchas personas en todo el mundo, especialmente en los países en desarrollo. Este indicador establece la necesidad que tienen las personas y los hogares de tener contar con la captura de peces como fuente principal de proteínas, o como un producto para comercializar de forma local junto con otros alimentos. Suele tener unos costes de explotación relativamente pequeños y el pescado que se captura cumple con fines de consumo local.
Gracias a la pesca artesanal disfrutan de un muy buen aporte de proteínas, aminoácidos esenciales y ácido graso omega-3. Estos ácidos tienen efectos en el desarrollo del sistema nervioso, visión en los niños y en los adultos, previene enfermedades cardiovasculares y disminuye el colesterol. La Organización Mundial de la Salud detalla que los ácidos grasos omega-3 son esenciales para una buena salud y un desarrollo adecuado, el organismo no puede producirlos por sí mismo siendo la razón de ingesta en cantidad suficiente de alimentos como el pescado.
Así como distintas organizaciones se pronuncian a favor, los que hacen vida también relatan sus vivencias pero con carácter de leyendas que se trasmiten de generación en generación. El pescador y la diosa es sin duda una, que cuenta como Faón, un muchacho que se ganaba la vida trasportando viajeros y productos en su barca, conoce a una mujer extraña. El joven vivía en la isla griega de Lesbos, misma donde todos los días laboraba; un día Faón estaba junto al embarcadero muy cansado de las faenas de la jornada cuando se le acercó una pobre mendiga.
Era evidente que no podría pagarle el viaje, sin embargo le pidió encarecidamente que la condujese hacia Asia Menor. A Faón le había conmovido su aspecto y, aunque solo quería descansar, hizo navegar su barca con una ligereza asombrosa llegando poco después a su destino. Una vez allí el muchacho sacó de su bolsillo la moneda de mayor valor que tenía y la entregó a la mendiga para que pudiese continuar el viaje. En vista del gesto, la mujer le obsequió un vaso de un perfume extraordinario, mismo que lo atrapó con una fuerza que parecía embriagarle el corazón. Fue cuando el humilde pescador comprendió que había llevado en su pequeño navío, a la mismísima Venus, la diosa del amor.
Implementos y herramientas de la pesca artesanal
La práctica de la pesca artesanal es una de las actividades más antiguas para el sustento humano, en un principio realizada para recolectar especies, pasando posteriormente a convertirse en toda una técnica con ingenios de caza. Algunas leyendas niponas describen el origen de la pesca hace miles de años, en el primer siglo de nuestra era según relatan, una emperatriz conocida como Zingo fue la primera en fabricar un anzuelo de pesca con una aguja, usando también granos de arroz como cebo y, gracias al hilo de sus prendas, confeccionó una cuerda de amarre sujetada a una vara larga y delgada; gracias a esta herramienta consiguió capturar una gran trucha.
Como dijimos, la pesca artesanal es de pequeña escala, así que utiliza tecnología y técnicas de pesca de bajo coste. Típicamente tienen redes de enmalle hechas a mano con flotadores adheridos a la parte superior, muy utilizadas en la pesca al cerco.
Cuentan a su vez con las redes pasivas que son aquellas que aprovechan el comportamiento de los peces para que sean ellos mismos quienes acaben atrapados sin tener que hacer nada más que colocarlas, por otra parte las redes activas que se utilizan de forma continua para perseguir o dirigir a las especies para que caigan atrapadas; estas dos son las ramificaciones principales derivadas de una red de pesca.
En los diferentes países de todo el mundo podemos encontrar modelos distintos pero todas con unos sistemas muy similares, estos mecanismos han variado con el paso del tiempo por la necesidad de modernizarse para generar avances de los tiempos de trabajo y obtener una mayor tasa de captura que mejore la productividad en la pesca artesanal. Con el aumento de los conocimientos y la evolución dinámica, se constató que aunque los recursos acuáticos no eran infinitos, por tanto es necesario administrarlos de manera apropiada para poder mantener el disfrute de su contribución nutricional.
Fue así como la aprobación en 1982 del Derecho del Mar en la Convención de las Naciones Unidas proporcionó un nuevo marco para el ordenamiento de los recursos marinos, en el régimen jurídico de los océanos se confirió a los Estados los derechos y responsabilidades para la distribución y aprovechamiento de los recursos pesqueros dentro de sus zonas de jurisdicción establecidas como nación, que representan alrededor del 90% de la pesca marina.
A veces se percibe la pesca artesanal como mucho menos importante que la pesca industrial, basándose en las estadísticas presentadas por distintas empresas que se dedican a la industria. No obstante en términos de empleo, este tipo de pesca emplea casi 6 veces más personas que la industrial en todo el mundo, tenemos 52 millones frente a 9 millones de personas empleadas.
Aguas reguladas
Por tanto, es obvio que en muchos niveles, la pesca artesanal gana sin lugar a dudas en términos de eficiencia, seguridad alimentaria y de empleo, siendo esta mucho más sostenible. Según los investigadores de la Universidad de Columbia Británica, la pesca tradicional es sin duda la mayor esperanza para una pesca sostenible. A principios de década, la Organización de las Naciones Unidas para el Fomento a la Alimentación (FAO) publicó un documento que presenta el escenario de la pesca mundial y en el que destaca un análisis de las condiciones actuales en que se reproducen las sociedades pesqueras a pequeña escala. En el texto se consideran algunas de las características socioculturales advertidas anteriormente como puntos complementarios que dan forma a la realidad que viven los trabajadores encargados.
La pesca artesanal tiene reservadas las primeras cinco millas de los espacios delimitados para realizar su labor, esta es denominada Área de Reserva para la Pesca Artesanal. La Ley de Pesca propia de cada país establece otras medidas como que la primera milla marítima es para el uso exclusivo de embarcaciones con menos de 12 metros de eslora, y que se rigen por un acuerdo general de acceso complementado con varios sistemas especiales.
Los espacios físicos utilizados en el borde costero denominados comúnmente caletas corresponden como apoyo para el sector, en ellos confluyen todas aquellas tareas de soporte a la labor como extracción, como mantenimiento, comercialización e incluso actividades de carácter social y cultural.
Actualmente la regulación general, tanto para pesca artesanal y/o para el sector industrial, lo constituyen las cuotas, que pueden ser de distintos grados como individuales o nacionales; los cierres de acceso que son garantía de la regulación de nuevos actores; las vedas que pueden ser biológica o extractiva, y la regulación de aparejos de pesca y tallas mínimas que dependen mayormente de la especie así como del territorio en que se encuentra.
Permisos necesarios
Una de las actividades de recolección y subsistencia que desarrolló el hombre hace miles de años fue la pesca para satisfacer sus necesidades alimenticias, desde la Edad de Piedra se capturaban peces en aguas continentales y en el mar, iniciando con el uso de las manos hasta la invención de lanzas para facilitar la actividad. En Mesopotamia ya se criaban peces en estanques de distinta capacidad para posteriormente venderlos secos o salados, desde entonces existían costumbres que siguen vigentes hoy en día aunque las técnicas si han evolucionado con el tiempo.
Actualmente muchos jóvenes ven en la pesca artesanal una oportunidad de aventura, dinero y cohesión social porque en sus pueblos, la pesca no solo es fuente de alimento sino también puente conductor de las actividades sociales propias de su zona. Las oportunidades para los nuevos pescadores son abundantes. Con el tiempo se convierten en especialistas empíricos porque adquieren conocimientos durante los viajes que realizan, puede dedicarse solo a sacar camarones, langostas o, con dar un vistazo, bancos de peces.
La especie más capturada a nivel mundial es la anchoveta peruana la cual acaba transformada en harina y aceite de pescado, le siguen en la lista el colín de Alaska, el arenque del Atlántico y la caballa.
Los primeros permisos de pesca artesanal, industrial, comercial, mayoristas y minoristas, son enmarcados en los programas de apoyo de estas labores que son ofrecidos por las instituciones gubernamentales como parte de los servicios públicos. Los interesados deben acudir a solicitar su credencial de pesca con los funcionarios encargados en la emisión de la misma, tras ser verificados los datos personales en el sistema se acredita el permiso para ejercer sus labores diarias. Se prevé que en los encargados ofrezcan un sistema automatizado que siendo más rápido entregue un carnet de vigencia 4 años, generalmente, para darle al usuario un servicio eficiente.
Con esta credencial tienen más seguridades y proporciona al gobierno el manejo de situaciones irregularidades como el hecho de que personas que no son pescadores se infiltren y quieran tomarse sus puestos para hacer actos ilícitos como frecuentemente ocurre.
Por su parte la primera ley modelo del mundo sobre pesca artesanal beneficia a millones de personas que viven de esta actividad, fue aprobada el 22 de junio del año pasado por el Parlamento Latinoamericano y Caribeño (Parlatino) con el firme propósito que los países la adapten a sus realidades nacionales. Entre sus puntos prohíbe el trabajo infantil y propone políticas de acuerdo a la situación económica de los pescadores y sus familias, estado nutricional, la discriminación que sufren y un trato equitativo para pescadores artesanales en temas como impuestos y créditos. También llama a los países que no han participado, a firmar el Plan de Acción Internacional contra la Pesca Ilegal.
Así, uno de los grandes retos que las sociedades pesqueras deben enfrentar hoy en día es mantener el control de sus recursos, estos suponen beneficios y consecuencias que a continuación detallamos.
VENTAJAS
Empleos. La pesca artesanal emplea tripulaciones de las zonas cercanas a la labor donde tiene su base las embarcaciones pequeñas, y éstas están compuestas por entre uno y cuatro marineros, de aquí su importancia en cuanto a la generación de empleo en los núcleos de población costeros. Representa más del 90% de la pesca de captura del mundo y de los trabajadores del sector pesquero suministran alrededor del 50% de las capturas mundiales de peces. De este modo significa una valiosa fuente de proteína animal para millones de personas en todo el mundo, a menudo sustenta las economías locales de las comunidades que viven en las riberas de lagos y ríos.
Valores. El hecho de que sea una actividad que promueva la participación de un grupo familiar incrementa la adquisición de valores que son impartidos como parte de un trabajo digno. La tradicional jornada a su vez es parte de una historia llena de costumbres que son reconocidas como parte de las zonas características en las que se practican.
Bajos costos. La pesca artesanal requiere inversiones no muy elevadas, así como en cuanto a sus costes de personal, como tampoco lo es el consumo de combustible, por esto todo no se precisa la dependencia de largas horas de jornadas con capturas muy elevadas para generar rentabilidad económica.
Actividad sin daños marinos. Este tipo de pesca emplea artes de pesca que no son agresivas en los espacios marinos, no es intensiva, y las capturas pueden alcanzar los 250 kg al día de pescado o molusco, siendo esta la máxima media por embarcación.
Más ecológica. Al tener un menor consumo energético también ocasiona menos emisiones del perjudicial dióxido de carbono (CO2), en comparación con los otros tipos de pesca como la industrial que se estima consume entre 14 y 19 millones de toneladas de combustible. Visto desde otro enfoque, con una tonelada de combustible con la pesca industrial se capturan entre 2 y 5 toneladas de pescado mientras que de forma tradicional 10 y 20 toneladas de pescado, por tanto esta última se considera menos contaminante y más eficiente.
Consumo directo. Solo el 56% de las capturas de la pesca industrial se destina al consumo humano local, frente al 77% de la pesca artesanal, que en su mayoría, corresponde al consumo humano directo. En los países costeros subdesarrollados o en desarrollo, este tipo de economía sostenible por parte de las familias es adquirido desde hace cientos de años y, en muchos casos, la única manera de subsistencia posible. Investigadores estiman que hasta el 90% del comercio de los productos pesqueros del mundo tiene lugar a través de la pesca artesanal.
DESVENTAJAS
Impacto social. Aún persiste una debilidad e informalidad laboral del gremio de pescadores tradicionales, acompañado de una pérdida de más de 20 mil empleos directos como producto de la eliminación de la pesca industrial de arrastre en muchas zonas costeras. Los efectos de esta medida suelen tratarse con pautas compensatorias improvisadas que resultan ser insuficientes.
Falta de organización. De hecho, el sector pesca artesanal, siendo productores independientes, en ocasiones no son capaces de controlar los medios de su reproducción social y recurrentemente su dinámica, conflicto enmarcado en un ámbito caracterizado por solicitudes de recursos que no son trabajados eficientemente. El sector debe apelar a construir su propia visión de futuro, también su propia normativa, logrando obtener el poder necesario que posibilita controlar la alimentación de nuestra generación así como las futuras.
Peligros. Es evidente que las condiciones a bordo de las embarcaciones han mejorado mucho, sin embargo, los trabajadores del sector pesquero en ocasiones se enfrentan a un medio hostil y un centro de trabajo inestable, en plena faena están sometidos a ruido elevado, jornadas de trabajo extenuantes y riesgos de origen diverso que atentan contra su integridad física. Los movimientos del buque pueden provocar cinetosis que es el trastorno debido al movimiento, y en el 95% de los marinos, pueden constituir un factor de estrés incrementado por ruidos y vibraciones a bordo.
Sin atención médica. Como la tripulación pesca artesanal es pequeña generalmente se omite el hecho de llevar un profesional de la salud que se encargue de las emergencias que se pueden generar. En caso de que algún pescadero sufra una lesión u otra dolencia, se interrumpirá la jornada para trasladarlo a tierra agravando el estado en que se encuentra por el trayecto que se debe recorrer.
Capturas erróneas. Como estos trabajos son muy pequeños en volumen por naturaleza, los cambios ocasionados en las poblaciones de peces son mucho menor que el de los países del primer mundo que utilizan buques pesqueros enormes y métodos nuevos con ayuda de la tecnología para encontrar y capturar eficazmente toneladas de peces todos los días. Sin embargo con la pesca artesanal a menudo se capturan delfines en las redes, que individualmente pueden no plantearse un problema significativo, pero a nivel mundial, las pesquerías tradicionales capturan más delfines que las flotas comerciales con mejoras de sistema.
Menor apoyo. El proceso de modernización ha generado una división del proceso extractivo que ha marginado a diversas caletas y puertos pesqueros, en este contexto figuran lugares de la costa que solo extraen y desembarcan, u otros en los cuales se concentra mayor transformación de los recursos pesqueros. Esta dinámica impide el impulso de las primeras zonas que generalmente están alejadas de los grandes centros urbanos y por ende reciben menor atención. Este caso es común ver como en los mayores puertos de las regiones productores no existen plantas de transformación que den valor a las capturas diarias realizadas por los pescadores. Además ha llevado a la sobre explotación perjudicando las principales pesquerías, podrían terminar en condición de colapso.
Futuro incierto. La situación actual de la pesca artesanal en algunos países es de difícil pronóstico, el sector se está desmoronando progresivamente con la disminución de recursos, población de pescadores envejecida intensificado por la falta de relevo generacional y la notable reducción del número de trabajadores. No es fácil revertir este proceso, requerirá muchos años de labores en conjunto que conduzcan a la mejora social y económica de la industria en general.
¿Prefieres que la pesca industrial sea el mecanismo que proporcione las exquisiteces del mar que llevas a tu mesa? ¿Consientes la idea de que los trabajadores artesanales gocen de mayor atención para potenciar sus actividades? ¿Te gustaría dedicarte a ello? Responde en los comentarios ¡Complácenos con tu opinión!
