Cada vez más, en España se han popularizado plataformas como Wallapop o Milanuncios, entre otras muchas, las cuales se caracterizan por la venta de artículos usados. Todos esos artículos pueden estar desde sin estrenar en su envoltorio original, a bastante usado o estropeados, estos últimos suelen venderse para aprovechar sus piezas para recambios o para renovarlos y repararlos.
La gran ventaja de adquirir artículos usados suele ser que son más baratos que sus equivalentes sin estrenar que podríamos encontrarnos en cualquier comercio al uso. Esto es especialmente notable en artículos electrónicos e informáticos como smartphones, tablets, televisores u ordenadores.
Comprar de segunda mano es rentable sobre todo en el caso de que el objeto que deseamos sea de marca que en el mercado son especialmente caras, como por ejemplo Apple cuando hablamos de móviles y ordenadores, o marcas de ropa como Gucci, Chanel o Louis Vuitton.
Decimos que es especialmente recomendable si queremos esas marcas ya que quizás si se trata de marcas blancas no se note tanto la diferencia.
También influirá, tanto en el precio como en la disponibilidad, el tiempo que haga que el producto saliera al mercado. Por ejemplo, es muy frecuente que en aparatos electrónicos o prendas de ropa y complementos los precios serán mucho menores cuando salen modelos más nuevos.
Aunque sean de características similares notaremos como los modelos de ediciones anteriores tienen un precio sensiblemente menor. La razón es que en ese caso lo que se está pagando es una marca y no solo la calidad, y sobre todo lo importante suele ser casi siempre seguir estando a la moda y poder sacar a relucir nuestra última adquisición a amigos y conocidos.
Sin duda una de las razones principales para vender en el mercado de segunda mano es sacarse un extra vendiendo todos esos trastos que tenemos abandonados en cualquier rincón de nuestra casa. Podemos sacarnos un dinerillo para gastos imprevistos o simplemente para darnos alguno de nuestros caprichos.
Sea cual sea la razón de que decidamos vender esos objetos, lo cierto es que en España esto no se estilaba mucho hasta hace bien poco, mientras que en otros lugares como en Estados Unidos existe casi una cultura dedicada a la reventa de útiles de segunda mano.
En esos lugares se aprovecha todo, allí son famosos y muy habituales los mercadillos en los jardines y garajes, en los que la gente vende los artículos muebles juguetes ropa todo y a la vez que se los quita del medio le sacan algo de rentabilidad.
Aunque normalmente en estos lugares los precios son mucho más baratos, esto puede no suceder en el mercado de segunda mano español, ya que aquí la picaresca y las ansias de sacar la máxima rentabilidad a todo pueden hacer que encontremos productos que son incluso más caros en el mercado de segunda mano que si los compramos nuevos a estrenar en cualquier gran superficie, lo cual en general es bastante absurdo y puede considerarse engañoso.
En el mercado de segunda mano podemos encontrar verdaderos tesoros que ya no están disponibles en las tiendas de origen. Objetos como pueden ser muebles antiguos, discos de vinilo, instrumentos musicales… de todo y más. Aquí dependerá mucho de la suerte y la pericia que tengamos a la hora de buscarlos.
Si lo que queremos es vender dichos artículos podremos jugar un poco más con los precios, ya que son artículos muy exclusivos por lo que grandes rasgos merece la pena pagar algo más. en estos casos tendremos que tener cuidado con las falsificaciones y las mentiras en cuanto a la antigüedad y la veracidad de los enseres que se anuncian por ejemplo es frecuente que nos vendan muebles como antiguos cuando realmente son solo imitaciones o documentos que supuestamente son reliquias y en realidad son solo buenas imitaciones.
Una buena forma de estar al día tanto de buenas oportunidades como de posibles estafas es recurrir a grupos de diversas redes sociales que reúnen a aficionados a la compraventa de los aparatos tecnológicos, los automóviles, la ropa… y todos los productos que podamos imaginar.
Otro tema muy relacionado con el de la antigüedad es la venta de artículos vintage, pues es indiscutible que todo lo vintage está de moda. Por ello los precios de todos los artículos catalogados bajo la etiqueta “vintage” suelen ser demasiado altos, sin corresponderse con el valor real del producto.
Por desgracia en muchos casos es solo una estrategia de marketing en la que lo que se pretende es hacer que paguemos más por esos artículos, cuando puede que incluso sea todo mentira, y simplemente sean viejos y no sean de la calidad necesaria para considerarse vintage.
Cierto es que la mayor parte de las veces si el artículo está muy trabajado y cuidan la presentación pueden llegar a timar a verdaderos expertos, pues incluso algunos de los compradores más curtidos en adquirir “joyitas” de segunda mano han sido engañados al respecto del valor y la antigüedad de ciertas prendas o accesorios.
Así, vemos cómo hemos de ser precavidos, informándonos bien antes de comprar el producto, para ello se recomienda consultar el precio de dicho objeto si lo compramos en una tienda, es decir el precio que costaría si lo adquirimos de primera mano, también tendremos que saber por cuánto se venden esos productos una vez abiertos y por supuesto cuanto cambia el precio de los mismos según el estado de conservación que presenten.
Pues por ejemplo no pagaremos lo mismo por un móvil que aunque haya sido usado este impoluto que por ese mismo modelo con la pantalla rota o algún otro defecto importante.
Por esto que cuando se trata de artículos caros como obras de arte o ropa antigua muchos acuden a tasadores profesionales para que sean ellos los que establezcan el precio justo para la venta, claro que para esto el vendedor tiene que estar de acuerdo y habrá que pagar también al tasador la comisión correspondiente.
Otro de los detalles importantes que afectan mucho el precio es el hecho de comprar productos que se encuentran en lugares que están lejos de nuestra propia ubicación, es decir, tendremos que pagar gastos de envío. Por lo que, sí el producto es muy voluminoso, puede ser que no nos merezca la pena comprarlo aunque en principio su precio nos puede aparecer un verdadero chollo.
En numerosas ocasiones los gastos de envío cuestan más que el objeto en sí, en ocasiones ese precio sube más del doble del que era el precio original.
También algo referente a los envíos que hay que destacar es que, si esperamos la llegada de un paquete, tendremos que estar pendientes de cuando llegan los mensajeros a traer el envío a casa, en el caso de entregas a domicilio, o sí tenemos que ir a buscarlos a los puntos de recogida establecidos, los cuales a veces están lejos o resulta complicado acceder a ellos.
Con lo que seguramente tendremos que organizar nuestra vida en torno a estos detalles, lo cual a veces resulta muy engorroso ya que tendremos que adaptar nuestros horarios y tareas para poder recibir el envío que esperamos sin problemas ni retrasos.
Por descontado, en caso de envíos, puede pasar que el producto llegue dañado o que directamente ni llegue porque se haya extraviado. En estos casos dependerá del tipo de envío que hayamos elegido, así como de si se ha contratado algún seguro que pudiera cubrir las pérdidas y desperfectos.
en los casos en los que hayamos sido precavidos podremos recibir una compensación, mientras que si no hemos pagado ese extra o si el envío es de los más económicos, tendremos que aguantarnos con el objeto dañado sin recibir nada a modo de indemnización.
En esas otras ocasiones en las que lo que sucede es que el objeto se pierde podremos intentar reclamarlo, en esos casos puede ser que nos devuelvan el importe que hayamos asegurado, que el paquete aparezca y llegué finalmente a nuestras manos o que directamente tengamos que dar por perdidos tanto el dinero pagado por el envío como el desembolsado en el producto que esperábamos.
Todo esto que hemos mencionado hace que muchos se muestren reticentes a realizar compras cuando hay que enviarlas o tienen que ser enviadas a sus casas.
Pues muchas veces también es un inconveniente para la persona que lo envía porque el producto puede ser devuelto y además son ellos los que en principio tienen que pagar los gastos aunque luego el comprador les pague esos gastos junto con el precio del objeto.
Por suerte, hoy en día hay avances y facilidades que han conseguido que las compras por Internet o a distancia sean mucho más cómodas, tanto para una parte como para la otra, algunos de ellos son la recogida del paquete en casa, dejándolo en el domicilio del destinatario, el abaratamiento de los costes del envío o mayor brevedad de entrega de los pedidos.
Desde luego uno de los temas más preocupantes al comprar en el mercado de segunda mano es la posibilidad de ser estafados, para evitar esto deberíamos tomar una serie de precauciones.
Por ejemplo, si fuera posible deberíamos chequear el estado de los productos que vamos a comprar en primera persona, si estamos ante un envío que viene de lejos y no podemos ver los objetos en primera persona, se recomienda pedir todas las fotos que sea posible, aunque aún así podríamos sufrir engaños por ello también se recomienda contratar seguros en caso de envíos.
Si realizamos la compra en persona no debe darnos vergüenza mirar detalladamente el estado de los productos, por ejemplo, si estamos comprando un móvil y nos han asegurado que está en buenas condiciones sería aconsejable encenderlo y realizar algunas actividades básicas cómo utilizar el navegador o la cámara.
Por último, hemos de tener en cuenta que, tanto a la hora de vender como de comprar mercancías en plataformas o tiendas de segunda mano, se pondrá muy a prueba nuestra paciencia.
La explicación es sencilla, debido a que nunca sabemos cuándo puede llegar la persona interesada por comprar el producto que nosotros queremos vender, puede que tardemos un considerable lapso de tiempo en obtener el beneficio que buscamos.
De la misma forma podría ser que cuando estemos buscando un producto en concreto no esté disponible para su venta en el mercado de la segunda mano, teniendo que afinar en estos casos nuestro escrutinio y mirar en plataformas o medios alternativos de venta de artículos usados.
Mientras seamos previsores y cautelosos podremos conseguir grandes gangas y objetos exclusivos que creíamos desaparecidos, así que, si encuentras eso que tanto tiempo llevas buscando, adelante, ¡toma las medidas oportunas y disfruta de ese chollo que has conseguido!
4 Ventajas de comprar artículos de segunda mano
1. Los precios:
La mayor ventaja de comprar artículos usados es que normalmente su precio es sensiblemente inferior al de ese mismo producto sin estrenar y en su embalaje original.
2. Artículos descatalogados:
Si buscamos bien podemos encontrar grandes tesoros, antigüedades, objetos de coleccionismo, obras de arte o instrumentos musicales podrían ser algunos de los ejemplos de las oportunidades que podemos encontrar si buscamos bien entre las ofertas de los portales y mercadillos de reventa.
3. Encuentra antigüedades y objetos vintage:
Quizás si tenemos suerte encontremos productos realmente genuinos y exclusivos a precios razonables o incluso “regalados”, todo es saber comprar y valorar si verdaderamente estamos ante ese tipo de oportunidades y no ante falsificaciones o similares.
4. Sacarse un extra vendiendo lo que no quieres o ya no usas:
Quizás esos cachivaches que tenemos aparcados en casa o en el garaje puedan reportarnos unos ingresos adicionales que nunca vienen nada mal. Quizás ese coche que ya no usamos pueda servirnos aún para algo en vez de acabar en el desguace.
6 Desventajas de comprar artículos de segunda mano
1. Puedes comprar un artículo con desperfectos:
Es habitual que los objetos de segunda mano presente diversos tipos de imperfecciones arañazos, abolladuras, roturas, fallos en el funcionamiento…
En estos casos lo importante será que tengamos claro los fallos que presenta el producto y valoremos si el precio se ajusta a la realidad o si es demasiado alto teniendo en cuenta los fallos que presenta el objeto.
2. Estafas y engaños:
Tendremos que estar muy atentos para evitar que nos den gato por liebre y nos puedan vender objetos deteriorados o falsificados.
Así mismo tendremos que tener mucho ojo a la hora de los envíos y que no nos lleguen cajas vacías.
3. Precios demasiado altos para los artículos:
Al tratarse de productos usados o seminuevos los precios deberían de ser siempre inferiores al de ese mismo producto en estado completamente nuevo y en su embalaje original.
4. Subida de precios en caso de envío:
Muchas veces no tenemos en cuenta que si el producto ha de ser transportado el precio total sube ya que hay que incluir los costes que conlleva el envío hasta nuestra casa.
5. El producto puede no estar disponible:
Si queremos comprar un producto puede que este no lo esté vendiendo ningún otro usuario en el mercado de segunda mano.
Por tanto, puede que tengamos que esperar, no sabemos cuánto.
6. Tiempo que se tarde en vender la mercancía:
Nunca sabes cuándo llegará el comprador que definitivamente se haga con el producto que ofertas.
¿Y tú qué opinas sobre los beneficios y los contra beneficios de comprar artículos de segunda mano?
Y tú, ¿eres comprador o vendedor habitual de artículos de segunda mano? ¿Has sufrido alguna vez una sorpresa desagradable relacionada con ese mercado?