Es objetivo vital para algunos, y abstracto, satisfacer a toda costa la soledad ¿Hasta qué punto es beneficiosa?
Existen muchos estereotipos relacionados a quienes sienten predilección por la soledad. Comúnmente los identificamos como individuos con problemas sociales y de adaptación. También, los asociamos a mujeres y hombres que no son capaces de resolver tareas diarias fuera de casa. En este sentido, creemos que se esconden y no se muestran realmente como son ya que ellos mismos lo impiden encerrándose en su hogar.
Sin embargo, estos estereotipos son ideas preconcebidas. Debemos entender que están basadas en opiniones en líneas generales, fundamentos nunca cuestionados. ¿Es cierto que tienen la mente atrofiada? ¿Has pensado que son más saludables que el resto? Descubre en el siguiente artículo los beneficios e inconvenientes de la soledad.
VENTAJAS
Tiempo a solas para ti. La comodidad de estar disfrutando de momentos sin compañía, podría ser más enriquecedor de lo que pensamos. No debes seguir el ritmo que otros imponen, ni mucho menos compartir las mismas ideas. Eres solo tú la prioridad, por lo que realizar actividades que te hagan feliz. Por ejemplo, dedicarte a leer los libros favoritos, ver series o practicar tareas caseras como la jardinería.
Menos problemas con la gente. La soledad sin duda garantiza el cese de discusiones, malos tratos y relaciones tóxicas. Los terceros que no aportan algo positivo a tu vida, son menos, dado que te encargas de mejorar el ambiente lleno de estrés que estos traen consigo.
Aprendes a elegir mejor tus amistades. Si bien eres de pocos amigos, tendrás a los sinceros. Ya no te preocupas por chismes o malos entendidos porque tu círculos de amistades respetan tu soledad y apoyan tus pensamientos. Sabes qué quieres y a quien, sin ningún tipo de brollo.
Autonomía personal. Quienes viven en soledad no dependen de otros, dado que se valen por sí mismos. Se vuelven independientes con el paso de los años y ayudan a los que les rodean. Valoran y quieren intensamente.
Atractivo particular. Como resultado de la poca interacción social, algunas mujeres y hombres se interesan por conocer a aquellos que no buscan aprobación. Entienden que el hecho de tener pocos amigos, incrementa la confianza y valoran su posición ante ciertos temas.
DESVENTAJAS
Poco apoyo. Si bien les agrada estar solos, comprenden que es necesario recibir apoyo en situaciones que se salen de sus manos. Delegar tareas o compartirlas, nos permite estar tranquilos pese a lo que ocurre a nuestro alrededor.
Te callas lo que sientes. Si tienes pocos amigos y prefieres la soledad, terminas por guardarte los aspectos negativos. Esos que tal vez propician el estilo de vida que adoptaste. Lamentablemente este tipo de personas, se muestran tan serias y calladas, que es fácil señalarle. Las críticas que reciben solo intensifican la coraza de la que se han valido y tras la que se esconden.
Momentos no disfrutados. Bien dicen que el tiempo pasa volando y nos arrepentimos de no haber vivido ciertas experiencias. Con la necesidad de estar en soledad, pierdes el interés por compartir con otros que de seguro te aprecian.
Agobiados y ansiosos. La paz que trae la soledad no es del todo segura, muchas veces se vuelve en contra. La tendencia a sentirse triste es también una desventaja, que se intensifica cuando vives solo. Llegarías a casa sin poder contarle a alguien como estuvo el día e irías a cenar sin compañía.
Dificultades en pareja. Algo que molesta, y bastante, es salir un fin de semana con amigos y que todos vayan con pareja pero tú estés solo. Los solitarios se acostumbran y lamentablemente tiene dificultad para iniciar una conversación, por lo que la soltería que se avecina es larga. Si están comprometidos con alguien, es habitual que discutan porque a invitaciones para reuniones responden siempre con un rotundo no.
¿Consideras que te agrada estar solo? ¿Disfrutas ese tiempo solo para ti? ¿Crees que dicha decisión, te ha costado ciertos inconvenientes? ¿Podrías mencionar cuáles? Anímate y comparte tus respuestas en la caja de comentarios ¡No olvides que te leemos!