Las relaciones a distancia son cada vez mas comunes gracias a las redes sociales.

En los tiempos que corren, con los avances tecnológicos que nos permiten mantener una conversación fluida con personas de cualquier parte del mundo, mucha gente se anima a buscar a su pareja ideal por Internet, así como a comenzar una relación a distancia. Aunque este no es, por supuesto, el único motivo por el que una pareja permanece separada ya que, dependiendo de la prosperidad laboral en el país de origen es un hecho que bastantes individuos se ven en la obligación de mudarse a otros países para buscarse la vida.

Lo más probable es que al inicio de la relación veas todo de color de rosa y no tengas ojos para otras personas pero, ¿has pensado qué pasará tras un tiempo? ¿Se acabará la pasión? ¿O quizá…el amor todo lo puede?

No podemos elegir de quién nos enamoramos ni tampoco las condiciones en las que lo hacemos, pero las relaciones a distancia son un arma de doble filo. Tengamos en cuenta que este tipo de relaciones puede salir bien si se tiene confianza plena en la otra persona y es posible que la relación consiga un punto de madurez muy alto. Por otra parte, tampoco podemos descartar que, tras un tiempo, al ver a nuestro amor nos demos cuenta de que no la conocemos realmente bien y decidamos terminar con ella.

PSICOLOGÍA DE LAS RELACIONES A DISTANCIA

Cuando nos enamoramos, nos centramos solo en esa persona especial y nos olvidamos de tener en cuenta factores externos a ella, como la distancia, que nos impiden estar a su lado o que pueden suponer un problema a largo plazo.

Para no correr el peligro de que pensar constantemente en querer ver a la otra persona se convierta en una obsesión, se recomienda mantenerse distraídos con actividades que llenen nuestro día a día. Así, además, a la hora de hablar con tu pareja podrás contarle todo lo que has hecho y no caerás en la monotonía y el aburrimiento de no saber qué decir.

También es importante que compartas tus sentimientos con tu pareja, ya que ella no se encuentra presente y le es más difícil darse cuenta de si en algún momento te encuentras triste o decaído. De esta forma, sabrá qué hacer y te sentirás arropado en todo momento.

Se considera crucial en este tipo de relaciones definir qué es el uno para el otro y sentar unas bases de confianza, sinceridad y comunicación muy fuertes, así como establecer unos objetivos en común, es decir, qué esperáis cada uno que suceda con la relación después de un tiempo.

Una condición añadida en los momentos de altibajos será pensar que te estás esforzando por ti y por tu pareja y tener en cuenta que en algún momento uno de los dos deberá acceder a establecer una relación de cercanía, ya sea mudándose o encontrando un punto intermedio donde ambos podáis establecer vuestra relación.

Llegados a este punto ha quedado claro que para que una relación a distancia funcione serán necesarios muchos más elementos aparte del amor como la madurez de ambas personas, el compromiso y la responsabilidad.

Pero no todo son esfuerzos y obligaciones debido a que, si este tipo de relación tiene éxito, será mucho más probable que funcione tras haber superado la barrera de la distancia que una relación convencional, ya que supone la creación y el fortalecimiento de un vínculo muy estrecho y especial entre ambos al compartir momentos de su día a día y mantener constantemente la ilusión por verse mutuamente.

PERO, ¿Y EL SEXO?

No todas las personas son capaces de aguantar la ausencia de contacto físico durante un largo tiempo, por lo que en este caso las redes sociales serán nuestras mayores aliadas. Aunque practicar cibersexo puede ser causa de pudor para mucha gente, es necesario mantener la chispa en este tipo de relaciones. Por ello, será de vital importancia hablar previamente del tema si se pretende llevar a cabo esta práctica. Podemos pensar que Internet no nos da la seguridad necesaria para plasmar ahí nuestras relaciones íntimas, por lo que se deberá sacudirse la vergüenza y atreverse a experimentar sin miedo a jugar con las imágenes y las palabras.

VENTAJAS

La relación no se vuelve cotidiana, puesto que el número de veces que ves a tu pareja es menos frecuente del que sería si esa persona tan especial estuviera cerca de ti.

Aprovecharás al máximo cada minuto que pases con pareja.

Tendrás más tiempo para ti mismo. No tienes que dedicarle, por ejemplo, el fin de semana a tu pareja, por lo que podrás salir con tus amigos a donde más te apetezca.

Las parejas a distancia suelen centrar sus expectativas en un futuro en el que ambos estén juntos, incrementando el compromiso entre ambas personas.

Ganarás autonomía e independencia, además de aprender a amarte tanto a ti mismo como a tu compañero o compañera sentimental.

Despertarás tu ingenio para mantener la chispa de la relación y sorprender a tu pareja con un gesto inesperado, como enviar una carta de forma tradicional o mandarle un regalo por correo.

Relaciones a distancia - Vivir un amor a distancia es duro pero puede darte un dosis extra de fortaleza.

DESVENTAJAS

Contacto frío e impersonal. Recordemos que no es lo mismo mantener una charla cara a cara que hacerlo a través de mensajes de texto o video llamadas, ya que la comunicación no verbal procedente de los gestos y expresiones que realizamos se torna inexistente.

Si eres una persona celosa, la distancia aumentará tus celos y desconfianza y provocará más discusiones en la relación pues no sabrás dónde se encuentra la otra persona o con quién está.

Todos sabemos que, aunque estemos hablando a diario con nuestra pareja por medio del teléfono o el ordenador, las palabras nunca podrán sustituir un abrazo o un beso, por lo que la sensación de soledad la frustración de echarnos de menos nos perseguirá a menudo.

El riesgo de que haya malentendidos a la hora de comunicarte con tu pareja será mayor. ¿Cuántas veces te has enfadado por algo que te han dicho en un mensaje y luego te diste cuenta de que tan solo era una tontería?

Podemos caer en la tentación de querer estar con alguien más. Está claro que el cuerpo tiene sus necesidades y si no vemos cercano un momento para estar con nuestra pareja quizá nos apetezca conocer a alguien más de nuestro entorno que pueda suplir…ciertas carencias.

Cada uno de nosotros tiene rutinas y modos de vida diferentes, por lo que saldrá a relucir la incompatibilidad de horarios para veros o hablar, que se acentúan si la otra persona reside en un país con diferente zona horaria que el tuyo. Asimismo, el tema económico también puede suponer un problema ya que viajar a otra ciudad o país no siempre implica un desembolso de dinero.

Al echar en falta a tu pareja en tu día a día, te apoyarás en las personas más presentes de tu alrededor como amigos y familia, que pueden jugar un papel en contra de tu relación si te ven pasarlo mal por el hecho de estar lejos de tu pareja, aconsejándote que cortes la relación. Nuestro entorno tiene gran influencia en nosotros y a la larga te puede llevar incluso a discusiones tanto con ellos como con tu pareja.

Las dudas sobre si la otra persona te quiere o si está pensando en una posible ruptura te llevará a un sentimiento de incertidumbre del que no sabrás cómo deshacerte fácilmente.

¿Alguna vez has tenido, o mantienes en la actualidad, una relación a distancia? Si es así, ¿cómo la sobrellevaste? Nos encantará leer vuestras historias en la cajita de comentarios.