Ser astronautas y viajar al espacio ha sido objeto de nuestros sueños alguna vez cuando éramos pequeños, descubrir nuevos mundos y planetas y, por qué no, alguna que otra criatura extraterrestre que solemos imaginar tal y como las representa el mundo del cine.

¿QUÉ CONDICIONES DEBES CUMPLIR PARA SER ASTRONAUTA?

Los astronautas deben prepararse durante años enfrentándose a una infinidad de pruebas y entrenamientos extremos, tanto de carácter físico como psicológico antes de despegar más allá de las fronteras terrestres.

En primer lugar, los astronautas deben superar un curso de entrenamiento básico que dura un año, donde los candidatos estudian ciencia, tecnología espacial, medicina básica, técnicas de submarinismo y se les enseña el funcionamiento de la Estación Espacial Internacional.

En segundo lugar, tendrán que asistir a un curso avanzado de otro año relacionado con la Estación Espacial Internacional. Asimismo, deben completar tanto el estudio y desarrollo de los experimentos y los vehículos de transporte como la función del centro del control terrestre realizada durante las misiones estelares.

Para finalizar, se les asigna una misión en la que, a lo largo de varios años, los aspirantes a astronautas cooperan con otros miembros de la tripulación aprendiendo diversas tareas. De esta manera, se familiarizan con las muchas técnicas que tendrán que poner en marcha en un futuro y con la continua ingravidez.

Resulta de vital importancia mencionar que es imprescindible manejar con soltura el inglés, ya que facilita la comunicación entre el propio equipo.

En cuanto a requisitos físicos, no se requiere ninguno en especial, aunque lo más importante es comprobar que la persona es capaz de aguantar las fuerzas gravitacionales de presión en el corazón.

¿CÓMO SON LOS TRAJES DE LOS ASTRONAUTAS?

En muchas ocasiones lo que más llama la atención de los exploradores del espacio son su peculiar atuendo, denominado EMU por sus siglas en inglés Extravehicular Mobility Unit, que significa Unidad de Movilidad Extravehicular. Pues bien, los trajes espaciales cuentan con más de 90 metros de tuberías que regulan el sistema de refrigeración. Además, su peso se sitúa alrededor de los 127 kilogramos. Cuentan con dispositivos de control térmico y suministros de oxígeno, entre otros soportes vitales. ¿Sabías que permiten permanecer al astronauta hasta 26 horas fuera de la nave? Imagina todo ese tiempo flotando por el espacio.

Este traje protege a los astronautas contra el frío, el calor, la radiación y la inexistencia de presión atmosférica fuera de la nave. A su vez, debe ser lo más cómodo y seguro posible.

La temperatura del espacio puede variar considerablemente. De hecho, la temperatura en el exterior del traje se regula por un Sistema de Enfriamiento Líquido para evitar su congelación, mientras que la temperatura en el interior del traje, es decir, la adecuada para el ser humano, debe ser regulada por un Sistema Primario de Soporte Vital.

Por supuesto, el traje debe contar con medios para realizar maniobras, como arnés y líneas de anclaje y liberación de la nave. También cuenta con un sistema de telecomunación para mantener el contacto en todo momento con los miembros del equipo e informar de si algo no está saliendo según lo esperado.

En cuanto a las partes del traje, este se encuentra compuesto por:

Casco, que debe permitir una correcta visibilidad y ser robusto para proteger los ojos de la radiación y la luz solar intensa, sin impedir la visión lógicamente. Asimismo debe disponer de micrófono, auriculares y una pantalla donde aparezcan mensajes escritos.

Tronco, constituye la parte central del traje.

Perneras, el traje se compone de unos pantalones y un anillo ventral que se puede ajustar como si de un cinturón se tratase para que lo puedan utilizar varias personas.

Guantes, que sí suelen ser hechos a medida ya que deben permitir una cierta sensibilidad para poder maniobrar con los distintos aparatos disponibles.

Mochila, que cuenta con dos botellas repletas de oxígeno para poder respirar, un regulador para compensar la diferencia de presión entre el interior del traje (que se sitúa en torno a unas 0,4 atmósferas) y la del exterior, las baterías y la radio.

Tubo de evacuación, que permiten al astronauta orinar y defecar.

Además, estos trajes evitan que los astronautas se hagan daño con pequeñas piezas de polvo espacial que, cuando viajar a alta velocidad, pueden resultar más dañinos que una bala.

Dicho esto, nos podemos preguntar qué le sucedería a un astronauta si se quitase el traje en el espacio. Bien, esperemos que nunca tengamos que ser testigos de esto, pero el proceso que resultaría de este hecho consiste en una despresurización, que consiste en que sus líquidos y gases saldrían de sus cavidades corporales e hincharían su cuerpo. En menos de 30 segundos estaría inconsciente y ya no sentiría nada. Además, se congelaría pues perdería su calor.

¿QUÉ ES LA ESTACIÓN ESPACIAL INTERNACIONAL?

Se trata de un centro de investigación situado en la órbita terrestre y cuya administración y gestión se encuentra a cargo de la cooperación internacional entre los países de Estados Unidos, Rusia, los pertenecientes a Europa, Canadá, Italia, Japón y Brasil. Su propósito es funcionar como un laboratorio, observatorio y fábrica, así como proporcionar el transporte, mantenimiento y actuar como una base de ensayo para posibles misiones a la Luna y Marte.

Esta estación tiene una superficie mayor a la de un campo de fútbol y, aunque se construyó en 1998, lleva habitada desde el año 2000 de manera constante. Orbita a poco más de 400 kilómetros de la Tierra, y es la tercera luz más brillante que podemos observar en el cielo, por detrás de las que desprenden el Sol y la Luna. Además, viaja a una velocidad de 27.743 km/h, por lo que tarda 92 minutos en dar una vuelta completa a la Tierra.

¿QUÉ EFECTOS TIENEN LUGAR SOBRE LOS ASTRONAUTAS EN UN VIAJE GALÁCTICO?

A corto plazo no sentiríamos ningún síntoma en especial pero, ¿sabes lo que ocurre cuando un astronauta permanece durante más de seis meses en el cosmos?

En primer lugar, las células de su cuerpo quedan expuestas a algunas radiaciones que podrían causar daños en el ADN. Recordemos que la atmósfera de nuestro querido planeta Tierra absorbe este tipo de radiaciones debido a la presencia de partículas de ozono en ella y, gracias a ello, podemos sobrevivir. Sin embargo, la incidencia de estas radiaciones en nuestras células, o en las de cualquier otro ser vivo, causarían mutaciones y, por consiguiente, aumentaría la incidencia de enfermedades de tipo genético que podrían, incluso, transmitirse a generaciones posteriores.

Por otro lado, la columna vertebral se estira lentamente debido a que desciende la presión sobre la espina dorsal, lo que puede hacer ganar a la persona hasta cinco centímetros de altura.

Al desaparecer la fuerza gravitatoria terrestre, se produce una redistribución de los líquidos corporales que provoca hinchazón en la cabeza, lo que tiene como consecuencia la aparición de cefaleas. Además, se generan distorsiones en el oído interno que afectan a la inclinación, la aceleración y el equilibrio. Otra consecuencia de esto es que el ritmo cardíaco desciende debido a la falta de gravedad, por lo que el músculo se hace más grande (sufre hipertrofia al tener que trabajar más).

En el estómago, la sensación de caída libre causa mareos y vómitos, lo cual puede ser peligroso si el astronauta se encuentra dentro de su traje. Por otro lado, se produce una pérdida de la densidad ósea de entre un 1 y un 2% por cada mes que pasan en el espacio. La descalcificación del hueso puede, a su vez, formar cálculos renales.

Las uñas se caen ya que los guantes del traje son pesados y voluminosos, lo que oprime los dedos y corta la circulación en los mismos. Por ello, sus manos terminan también con ampollas y heridas que, a su vez, puede ser la causa de posteriores infecciones.

Por último, la falta de gravedad produce atrofia en los músculos de las piernas, ya que recordemos que al flotar no hay necesidad de andar y ejercitarlas constantemente, por lo que dichas extremidades pierden volumen paulatinamente.

Cabe mencionar también las consecuencias psicológicas de llevarse una larga estancia en el espacio, ya que el contacto permanente con los otros miembros de la tripulación conlleva conflictos, discusiones y falta de intimidad.

¿Te gustaría trabajar con la NASA en la Estación Espacial Internacional?

¿QUÉ HAY MÁS ALLÁ? ¿EXISTE VIDA EN EL ESPACIO EXTERIOR?

El universo es infinitamente grande y, como sabemos, se encuentra en continua expansión. La vida puede abarcar desde un pequeño ser unicelular hasta nosotros mismos, los seres humanos, pasando por la inmensa cantidad de plantas y organismos. No obstante, para que esto tenga lugar deben darse las condiciones adecuadas (presencia de agua líquida, por ejemplo).

De esta manera, se estima que deben existir miles de planetas habitables como el nuestro, y no solo por las formas más básicas de vida, sino por especies inteligentes como nosotros, de las que, según las aproximaciones, debería haber hasta 100.000 tan solo en nuestra galaxia (suposiciones basadas en la ecuación de Drake).

Te contamos la interesante paradoja de Fermi, que presenta la contradicción entre dichas estimaciones que afirman que hay una alta probabilidad de que existan otras civilizaciones inteligentes en el universo observable y que, sin embargo, no existe ningún tipo de evidencia de esas civilizaciones. Las grandes preguntas son: ¿dónde están? ¿por qué no hemos encontrado pruebas de vida extraterrestre inteligente como sondas, naves espaciales o transmisiones?

Una posible respuesta para estas preguntas puede ser que el conocimiento y las observaciones llevadas a cabo por los humanos sean defectuosas e incompletas, impidiendo con ello identificar vida extraterrestre en el espacio aunque existiera.

No obstante, hay otras teorías, como la que sostiene que vida no es tan fácil que se produzca debido a que nuestro planeta se encuentra en un lugar y tiempo concreto (en el que nosotros vivimos, quizá si nos extinguiéramos nunca más habría vida inteligente en el planeta y años más tarde surgiera vida inteligente extraterrestre, pero no nos podríamos comunicar debido a nuestra extinción).

Además, contamos con unas condiciones especiales, como la presencia de la Luna, que estabiliza el eje de la Tierra y mantiene caliente el núcleo del planeta debido a las mareas, permitiendo con ello que sea fluido y que exista el campo magnético de la Tierra, sin el cual el viento solar acabaría con todo el aire y el agua presentes. Sin la Luna, además, se producirían variaciones del clima tan catastróficas que imposibilitarían la vida.

¿Sabes lo que es The Voyager Golden Record o, traducido al español, “La grabación dorada viajera”? Se trata de un CD que la NASA envió al espacio en 1977 con la esperanza de que algún extraterrestre lo encontrase y pudiera conocer cómo es la vida en nuestro planeta, y se trata de un disco repleto de música de canciones y sonidos de la Tierra.

Incluyó la palabra “hola” en 55 idiomas diferentes y canciones de Mozart, Bach o Beethoven, entre otros, así como el ruido emitido por un tren, los llantos de un bebé, el sonido de la lluvia, el código morse y fotografías de madres cuidando a sus retoños, astronautas y un violín. Este disco continúa flotando en el espacio, a millones de kilómetros de nosotros, y debería encontrarse en buen estado ya que fue realizado en cobre y cubierto de oro con el fin de protegerlo contra las temperaturas extremas y la radiación.

Recordemos, también, que existen multitud de formas de vida (por ejemplo, ¿sabías que existen bacterias que pueden vivir a 72 grados centígrados? ¿y otras que pueden estar a concentraciones altísimas de sal? ¿y otras que pueden vivir en ausencia de oxígeno? Dicho esto, es muy posible que exista vida más allá, aunque no como la conocemos.

¿PUEDO VIAJAR AL ESPACIO SIN SER ASTRONAUTA?

Desde hace algunos años, compañías multimillonarias desarrollan naves para viajes privados fuera de nuestro planeta como si de un hotel se tratase, por lo que ser astronauta no se convierte en un requisito imprescindible. Es el denominado turismo espacial, el cual se realiza a más de 100 kilómetros de altura desde el nivel del mar, lo que es considerado como la frontera para alcanzar el espacio. Hasta día de hoy, siete personas multimillonarias de diferente nacionalidad han viajado al espacio como meros turistas, lo que deja este gran placer al alcance de muy pocos.

CURIOSIDADES

Alan Shepard, tripulante del Apolo 14, decidió jugar al golf sobre la superficie lugar. En su tercer golpe, la bola fue tan lejos que su paradero es desconocido.

Laika, la perrita rusa que se hizo famosa por ser el primer ser vivo terrestre que viajaba al espacio en 1957, murió a las pocas horas de ser enviada al espacio a causa del elevado nivel de estrés que sufrió.

La Estación Espacial Internacional cuenta con un gimnasio para que los astronautas se ejerciten de manera regular.

La mejor forma de ensayar en la Tierra para viajar al espacio es bajo el agua, debido a la ingravidez que conlleva flotar.

¿Te has preguntado a qué huele el espacio? Los astronautas han reconocido olores como el de la carne, y el metal, mientras que otros afirmaron reconocer aromas frutales, ron, ocre y humo.

Buzz Aldrin, uno de los tres participantes en el primer alunizaje de 1969, llevó un pequeño kit con el objetivo de comulgar en la Luna, convirtiéndose así en la primera y única persona que ha celebrado un oficio religioso y ha consumido vino en nuestro satélite.

Lo más lejos que ha llegado el ser humano fue a una distancia de 400.171 kilómetros desde la Tierra. Este récord se consiguió en 1970 cuando los tripulantes del Apolo 13 pasaron a la cara oculta de la Luna. No podemos olvidar mencionar que el tiempo máximo que una persona ha pasado en el espacio corresponde con 2.2 años, cifra conseguida por Sergei Krikalev.

VENTAJAS

En el espacio exterior no existen los ronquidos debido a que, en el vacío, las ondas del sonido no pueden propagarse.

vances a nivel tecnológico. ¿Sabías que algunos de los utensilios que más utilizamos hoy en día fueron generados gracias a los viajes espaciales? Tenemos como ejemplos los pañales desechables, sistemas contra incendios, estudios sobre el daño que puede tener los rayos ultravioleta sobre el ser humano, los rayos láser, el monitoreo climático, materiales anticorrosivos, los sistemas de diálisis, los escáneres, los purificadores de aire, seguidos de una larga lista. Podríamos sumar cerca de dos mil innovaciones gracias a ello.

Nuestro planeta es precioso cuando lo vemos desde dentro, pero imagínate sacar una buena foto de la Tierra desde el espacio, ¿no te gustaría tenerla colgada en tu salón?

La gravedad cero es algo que a todos nos gustaría experimentar alguna vez. Resulta emocionante estar flotando por ahí, e incluso dormir puede que sea más cómodo que en nuestra propia cama. Eso sí, hay que tener cuidado de no golpearse la cabeza al dormir dentro de la nave. No obstante, no es necesario ser astronauta para experimentar esto, ya que existen en la actualidad simuladores de gravedad cero que imitan esta sensación dentro de una cámara de aire en la que la persona es capaz de flotar.

Para llegar a ser astronauta debes tener verdadera motivación y curiosidad para descubrir nuevos mundos y posibilidades.

Ser astronauta implica saber moverte en espacios cerrados como esta nave espacial

DESVENTAJAS

Si no eres astronauta, te resultará muy caro viajar al espacio.

En cuanto al traje espacial, se requiere mucho tiempo para ponérselo y quitárselo, es incómodo y muy pesado.

Complicaciones para ducharse. Casi el cien por cien del agua que los astronautas consumen en el espacio pertenece a la Tierra, por lo que deben racionar extremadamente bien su uso. Por ello, simplemente se enjabonan con un baño húmedo.

Presencia de insomnio. El ser humano es un ser diurno, ha evolucionado para que su metabolismo sea mayor durante el día y descansar durante la noche. Sin embargo, en la Estación Espacial Internacional los astronautas pueden llegar a ver amanecer hasta 16 veces al día, lo que sin duda estimula los fotorreceptores presentes en sus ojos, lo que incita a despertar.

Ir al baño se convierte en una verdadera odisea. Para orinar, el inodoro posee un embudo con ventilador que succiona el líquido para que no quede flotando por la nave (recordemos, gravedad 0). Más tarde, la orina recolectada se envía a un sistema de depuración para más tarde transformarla en agua apta para el consumo de los propios astronautas.

Efectos no deseables en el organismo.

Comida poco variada. El menú espacial no tiene mucho que ofrecer, ya que casi toda la comida se encuentra envasada, procesada y perfectamente empaquetada para que se conserven durante varios años. Estos alimentos, claro está, aportan todos los nutrientes necesarios para los astronautas y ocupan el menor espacio posible, algo muy importante dentro de una nave espacial. Sin embargo, te aseguramos que no son un delicioso manjar.

¿Alguna vez has soñado con ir al espacio? ¿Te gustaría trabajar la estación espacial internacional? ¿Cómo crees que sería tu vida siendo un astronauta? ¡atrévete a contárnoslo!