Los colchones ortopédicos han sido promocionados masivamente gracias a su soporte fisiológico y ergonómico
En la década de los años 50, se diseñaron los primeros colchones ortopédicos luego de numerosos estudios médicos que sugerían un cambio en los diseños. La información revelada, ayudó a conocer mejor nuestros huesos y su función, reconociendo un nuevo diseño de colchón podría ser capaz mejorar el dolor de espalda. Esto incitó el desarrollo de los modelos revolucionarios, realizados precisamente de acuerdo a las normas ortopédicas. Sin embargo, en este punto de expansión en el mercado, el término ortopédico fue aprovechado por cientos de fabricantes. Los mismos ofrecían productos que no adoptaban las medidas correctas, solo con el fin de aumentar las ventas.
Para 1960 la NASA jugó un papel importante inventando el material conocido como espuma de memoria. Luego de tres décadas, comenzó a ser utilizada por la industria del colchón. Desde entonces, se encuentran en casi todos los hogares, pero, ¿son la mejor opción? Descúbrelo en el siguiente artículo, así como los beneficios e inconvenientes de los colchones ortopédicos.
VENTAJAS
Seguros y cómodos. Los fabricantes de los colchones ortopédicos se preocupan por incluir varios aspectos en sus diseños, siendo el principal presentar un modelo ergonómico. De este modo simulan los contornos del cuerpo y posición de la columna vertebral, garantizando comodidad. Teniendo en cuenta la fisiología de nuestro cuerpo, nos ofrecen las mejores opciones con respaldo de las normas ortopédicas y avalados por expertos en traumatología.
Menor riesgo de dolencias. Un colchón común puede provocar dolor en los músculos y en las articulaciones, por no contar con un soporte estable que asegure el descanso. Si durante las mínimas 8 horas de sueño, reposamos en él, se aumenta el riesgo de padecer molestias en la espalda. La opción ortopédica proporciona un soporte firme que evita malas posturas y peso desproporcionado.
Mejor descanso. A veces estamos obligados a girar varias una y otra vez el colchón en el que dormimos para encontrar un mejor lugar y descansar. Sin importar lo que hagas, siempre aparece una depresión y finalmente tu cuerpo cae en ella aplicando presión sobre la columna vertebral. La repetición de esta rutina por la noche, e incluso en las siestas, pierdes horas de sueño y terminas más cansado que antes de ir a la cama. Con los colchones ortopédicos te olvidas de este molesto problema, disfrutando al máximo el sueño reparador.
Variedad. Puedes encontrar en el mercado distintas opciones que se adapten a tu presupuesto y tamaño. Desde modelos individuales para los niños, hasta matrimoniales, con calidad certificada. Para ello, asegúrate de estar visitando una tienda seria y responsable que entregue al público productos con sellos reales, demostrando que sí están fabricados bajo las normas establecidas.
DESVENTAJAS
Copias del producto. No es sencillo diferencian los colchones ortopédicos de los comunes, por lo que acostumbramos a confiar en los venderos. Así como ocurre con otros tantos productos, la mayoría de los fabricantes venden los diseños comunes y aseguran que cuentan con las normas ortopédicas. Como consecuencia, los compradores llevan a casa un artículo que incrementa las dolencias musculares y agravan los episodios de cansancio excesivo.
Pesados y voluminosos. Los colchones ortopédicos tienden a ser más gruesos por el material que se emplea en su fabricación. Cambiarlos de habitación puede ser un inconveniente, o el hecho de trasladarlos luego de su compra.
Mayor costo. Una de las mayores desventajas con respecto a estos, es el costo en comparación a los comunes ya que en ocasiones lo superan hasta en un 50%. No resulta viable para muchas familias, sobre todo para las que tienen más de 3 integrantes puesto que el presupuesto en el hogar es ajustado.
No están exentos de sufrir daños. Aunque suelen durar más tiempo, tienen el mismo riesgo de dañarse con la humedad o con otros factores del ambiente. Para evitarlo, es aconsejable resguardarlos con forros confeccionados para ello.
¿Usas colchones ortopédicos? ¿Los adquiriste por recomendación de un experto? ¿Sufres de dolores en la espalda? ¿Se alivió tu malestar por cambiar de colchón? Anímate y comparte tu experiencia en la caja de comentarios ¡Te leemos!
